El 14 de Octubre de 1957 un drama de grandes proporciones asoló la ciudad de Valencia y, por consiguiente, a nuestro equipo .Y es que violentísimas lluvias lanzaron sobre la ciudad centenares de metros cúbicos por metro cuadrado haciendo que el río Turia se desbordara a la altura de las Torres de Serranos por encima de los peores augurios. Tanto que llegó a alcanzar siete kilómetros de ancho en su desembocadura. Es por esto que el agua y el barro que el río estaba arrastrando inundaron la ciudad y la convirtieron en un escenario dantesco. Hubo 81 muertos y desaparecidos con miles de personas sin hogar y con daños calculados entonces en una cantidad económica muy importante. Para recordar aquel hecho algunas de las fachadas de nuestra ciudad exhiben pequeños azulejos que indican el nivel que alcanzaron las aguas en aquella inundación. Nuestro campo de Mestalla por supuesto quedó totalmente inundado y el agua llegó hasta los graderíos dejando prácticamente inutilizado el recién reformado estadio dos años antes con las sillas caídas sobre el terreno de juego y la imposibilidad de acceder al túnel de vestuarios. Estos vestuarios primero fueron una gran balsa de agua y luego un gran bloque de barro.
Con todo , las consecuencias para el club se pueden considerar mínimas si se comparan con lo que supuso para la ciudad. La noche anterior a este día el Valencia había jugado contra la Real Sociedad en Atocha en un partido con poca historia en el que se empató sin goles. Al recibir la expedición en el viaje de vuelta las noticias que llegaban de la ciudad decidieron con acierto no acercarse más y esperar hasta que la catástrofe se relajara. Aún con el campo anegado , la Junta se puso en marcha para paliar tal catástrofe y se celebró una asamblea en las gradas de tribuna . Entonces , se decidió aplazar el partido contra el Sporting de Gijón y se disputaron cinco partidos consecutivos fuera de casa que dejaron al equipo en las últimas posiciones de la tabla pero se pudieron recuperar en la segunda vuelta de la competición …