Al finalizar la temporada anterior el Valencia no renovó el
compromiso con Mundo y se contrataron los servicios del ex jugador del Real
Madrid Sabino Barinaga que logró apabullar en la primera vuelta de la Liga de
la temporada 1965 – 66 pero que entró en una dinámica de derrotas en la segunda
vuelta para finalizar en una mediocre novena posición en la Liga. Entre las
bajas destacaron las de Piquer y Héctor Núñez, que tan buen rendimiento dieron
al equipo, y entre las altas destacan sin duda la de dos jugadores que han sido
santo y seña de la historia del Club como el defensa Juan Cruz Sol y el medio
Claramunt. También el guardameta Pesudo regresó de su aventura barcelonista y
se fichó al lateral Tatono y al delantero Ansola. En Copa, una vez más el Atlético
de Madrid consiguió minar las aspiraciones valencianistas y, tras vencer a la
Unión Popular de Langreo, de nuevo los colchoneros consiguieron vencer en una
eliminatoria muy ajustada. En Copa de Ferias tampoco se pudo brillar a gran
altura ya que se necesitó un tercer partido de desempate para vencer al
Hibernian de Edimburgo y se venció en la siguiente fase fácilmente a los suizos
del Basilea. Pero llegaron los ingleses del Leeds United, que era un equipo de
gran altura y, aunque se consiguió empatar en Eilan Road en un partido de gran
dureza, en Mestalla vencieron los ingleses por un solitario gol. Con este
bagaje, Barinaga presentó su dimisión y se volvió a llamar a Mundo para dirigir
al equipo y realizar una serie de amistosos en Méjico. Por otra parte se invitó
al Valencia a disputar la Pequeña Copa del Mundo en Caracas, Trofeo Simón
Bolivar, que fue una versión inicial del Mundialito de Clubes, y cuajó una fantástica actuación ya que venció por dos veces a la Lazio de
Roma y al de Vitoria de Guimaraes y una vez a la selección de Venezuela por lo que
fue el vencedor final. En Mestalla se
disputaron amistosos con el Arsenal (0-0) y el Wiener Sportklub (6-1).