31 de agosto de 2009

Con la llegada de Jacinto Quincoces como entrenador casi se consigue el doblete.


La Temporada 1948 – 49 fue la de las Bodas de Plata del Estadio de Mestalla que se celebró con una serie de festejos especiales. En cuanto a la dirección del equipo se contrató a uno de los grandes jugadores españoles de la época anterior a la Guerra Civil como fue el defensa Jacinto Quincoces, quien antes había entrenado ya en el Real Madrid y Zaragoza e incluso había sido seleccionador español. Con él el equipo empezó a utilizar el sistema W-M originario del Arsenal de Londres .Por tanto en Liga fue capaz de transmitir a sus jugadores un estilo nuevo al confiar ciegamente en ellos y se produjo nuevamente un duelo mortífero entre el Valencia y el Barcelona aunque al final de la primera vuelta fuera el Real Madrid el que encabezaba la clasificación. Finalmente el Barcelona fue el vencedor aunque el Valencia fue el equipo más goleador de la Liga y debió conformarse con el subcampeonato.
Pero en Copa la trayectoria del equipo fue imparable y se eliminó sucesivamente al Deportivo de la Coruña, Real Sociedad, Barcelona para llegar a la final ante el Athlétic de Bilbao en el novísimo Estadio Santiago Bernabeu de Madrid. El Valencia realizó un magnífico encuentro que se resolvió con un solitario gol de Epi que convirtió al Valencia en vencedor del trofeo y provocó una euforia desmedida en la ciudad de la que la prensa se hizo eco. Mundo fue el encargado de recibir la Copa de manos de Franco. Luís Casanova fue nuevamente premiado en esta ocasión por parte de la Federación Española con la Copa de Honor. Además el Valencia venció en amistosos ante los equipos franceses del Saint Etienne, Sochaux, y Stade Francaise. Célebre fue el famoso enfrentamiento entre el jugador Monzó y el propio Quincoces que casi produjo que llegaran a las manos y que hizo que siempre el entrenador se dirigiera llamándole señor al jugador, lo que le sacaba de sus casillas. Como curiosidad se introdujeron en esta temporada los números en los dorsales de los equipajes de los jugadores , antes inexistentes , y que los postes y largueros , antes rectangulares , en lo sucesivo iban a ser redondos.Mostramos unas imágenes de Asensi , Eizaguirre y Puchades con la selección y de un curioso cartel taurino con el equipo vencedor de la Copa.

Video de la Victoria en la Final de Copa de 1949.

25 de agosto de 2009

Iturraspe y Pasarín marcaron una época tanto en el campo como en el banquillo ché.


Aunque Carlos Iturraspe no nació en Valencia, su condición de donostiarra no le impidió que se sintiera un valenciano más y derrochó raza y corazón en defensa de los colores blancos. Se inició en el fútbol en Madrid compaginando sus estudios de medicina con el Unión Sporting y el Nacional. En el año 1933 fichó por el Valencia donde permaneció como jugador durante 13 años hasta el 1946 para ganar dos Ligas y una Copa y disputar cuatro finales más. Finalmente se retiró en el Levante en el año 1948. Como este medio centro tenía el fútbol en sus venas inició su carrera como entrenador y se dice que descubrió a Puchades y Sol y llegó a recomendar la contratación de un Luís Suárez que se descartó por caro. Comenzó entrenando al Sueca cuando aún era jugador y también lo hizo en el Mestalla y Deportivo de la Coruña en dos etapas, Betis, Málaga, Atlético Tetuán y en el 1954 al Valencia sustituyendo a Quincoces. Pero su trayectoria valencianista finalizó tristemente en mayo de 1956 cuando fue cesado al ser eliminado por el Jaén en Copa.
Luís Casas Pasarín será recordado como un gallego que tuvo una gran calidad como defensa y que atesoraba nobleza y elegancia en el terreno de juego. Tenía enormes condiciones físicas, cabeceaba bien y era inteligente en sus actuaciones. Se inició como jugador en su ciudad natal de Pontevedra y fue progresando hasta llegar a Vigo que era la cuna del fútbol gallego de aquella época. Este defensor de prestigio vistió la camiseta nacional por vez primera en los Juegos Olímpicos de Amberes contra Italia y disfrutó de seis internacionalidades. Con el Valencia ascendió a Primera División en el año 1931 y disputó la primera final de la Copa del Rey de los valencianos ante el Real Madrid. Cuando abandonó su carrera como jugador se formó como técnico y llegó a ser seleccionador nacional, aunque solo fuese en un encuentro en que se perdió contra Irlanda en Madrid. Posteriormente entrenó al Valencia, Celta, Oviedo, Málaga y Granada. Como técnico del Valencia logró pasar a la posteridad entrenando a jugadores eternos como Puchades y sucediendo al mismísimo Eduardo Cubells. Prueba de su triunfo en Valencia también como técnico fue la Liga conseguida en 1947 y un subcampeonato del 1948 que fue muy criticado en la ciudad y ,por ello, no dudó en renunciar a su cargo. Esto motivó que tuviera fama de tener poco aguante con las opiniones críticas hacia su trabajo y tuvo enfrentamientos violentos muy sonados con la prensa. Falleció en Agosto de 1986.

21 de agosto de 2009

La pérdida incomprensible de una Liga que ya estaba en el bolsillo del equipo.


La carambola que se había producido en la Liga anterior para que el Valencia la ganase se produjo en la Temporada 1947 – 48 pero en el sentido contrario y una liga que ya teníamos en el bolsillo desapareció de forma sorpresiva. Pero para empezar, el Valencia perdió en Madrid la Copa Eva Duarte de Perón ante el Real Madrid. Este torneo ,que había sido instituido por el San Lorenzo de Almagro en homenaje a la célebre Evita, lo disputaban los campeones de Liga y Copa y fue el antecedente de la actual Supercopa de España. Además , como el fútbol se estaba profesionalizando los jugadores empezaron a pedir revisiones económicas en sus contratos y como ya sucedió dos años antes el propio Epi junto con Eizaguirre y el delantero Igoa se negaron a jugar si no se les revisaba el sueldo. El club declaró a los tres en rebeldía e inició la temporada sin su participación y con la incorporación entre otros de los pundonorosos Santacatalina y Gago que en esta fotografía aparece con Epi. Ya en la cuarta jornada reaparecieron y el Valencia tuvo una línea muy regular que le permitió concluir la primera vuelta como líder con una goleada de escándalo al Celta por 7 – 1 con el que mantenía un codo a codo en lo más alto de la clasificación y en el que destacó sobre todo el juego de Igoa en el que fue seguramente el mejor partido de su vida. La pugna liguera continuó hasta el final con el Barcelona pero este fue capaz de ganar al Valencia en Mestalla con una desafortunada actuación de Eizaguirre en uno de los partidos más grises de su vida, que provocó el subcampeonato final.
Perder la liga de aquella manera dejó secuelas y en Copa se pasó la primera eliminatoria ante el Valladolid pero en cuartos una Real Sociedad que había descendido a segunda división eliminó absurdamente al Valencia. Este fue el último encuentro de Pasarín como entrenador del equipo. Además la Federación Valenciana de Fútbol entregó a Luís Casanova una merecidísima medalla de oro al mérito deportivo. Mostramos una imagen del banderín que obsequió el Valencia al Alcoyano con motivo de su segundo ascenso a Primera División y curiosas publicidades de chocolates Acín y Palá.

17 de agosto de 2009

Viene un título de Liga inesperado con la llegada del mítico Antonio Puchades.


En la Temporada 1946 – 47 se produjo la histórica llegada de un jugador que marcó sin duda una época y que para muchos ha sido el jugador más importante de su historia. Y es que Antonio Puchades se incorporó con 21 años procedente de Sueca con un cuerpo atlético y un cabello rubio que llamaba la atención. Otro jugador fundamental que también debutó fue Vicente Seguí que estuvo 13 años en el equipo y disputó más de 250 partidos de Liga con 80 goles y una continuidad digna de todo elogio. También en esta temporada se produjo la llegada de Luís Díaz que iba a afianzarse en la retaguardia durante las diez temporadas que estuvo en Valencia y un cambio de entrenador como fue Pasarín, hombre de gran temperamento que tuvo roces con numerosos periodistas, que sustituyó a Eduardo Cubells. Tiempo después llegaría a ser seleccionador nacional. Se dice que en dos ocasiones protagonizó intentos de agresión contra responsables de prensa por no aceptar las críticas que se le hacían. Pero sin duda la inesperada consecución de un título de Liga que una semana antes nadie había soñado marcó su exitoso debut. La primera parte de la Liga fue irregular por las marchas de Lecue, Lelé, Gorostiza e Iturraspe y una inesperada lesión de Mundo que provocaron que el Valencia estuviese cinco partidos consecutivos sin ganar , pero una segunda vuelta plena de triunfos condujo al brillante título. No obstante, tuvieron que darse una serie de carambolas improbables a priori para que esto se produjera. Y todo salió como dibujado en un papel: el Valencia cumplió su papel goleando al Sporting de Gijón por 6 – 0. El Atlético de Madrid, antiguo Atlético de Aviación, perdía en el Metropolitano contra el Real Madrid 2 – 3 y el Atlético de Bilbao no pudo pasar de un empate a 3 contra el descendido Deportivo de la Coruña por lo que ,a igualdad de puntos con el Valencia, tenía un peor coeficiente de goles.
En la Copa se dio un paso atrás ya que, tras eliminar a duras penas al Alcoyano, no se pudo vencer en el partido de desempate contra el Celta de Vigo de Miguel Muñoz. Entre los amistosos internacionales que se produjeron destacó sin duda la visita del formidable equipo argentino del San Lorenzo de Almagro y consiguió empatar en un estadio abarrotado y con un público enfervorecido hasta el punto de que hubo gente que se sentó en el suelo junto a la línea de banda. En cambio no pudo vencer al Campeón brasileño Vasco de Gama en un partido celebrado en Lisboa aunque si se venció a una selección lisboeta compuesta por jugadores del Benfica y Os Belenenses. Asimismo el Mestalla alcanzó su techo puesto que ascendió a Segunda División y allí se mantuvo muchos años. Por otro lado entró en vigor el sistema de apuestas futbolísticas que iba a cobrar gran popularidad como fueron las Quinielas. Mostramos además una imagen del partido Castellón-Valencia de esa temporada.

Video con comentarios de Juan Ramón sobre aquel título.

5 de agosto de 2009

La "Bala Roja", Guillermo Gorostiza, como el látigo imparable de la "delantera eléctrica".


La bala roja, Guillermo Gorostiza, nació en Santurce en el año 1909 y falleció en el 1966 pasando por ser uno de los jugadores más emblemáticos del Valencia en su historia. Dejó la escuela muy pronto para trabajar y su primer equipo fue el Arenas Club de Getxo. Antes de cumplir 20 años ya se había escapado a Argentina por las diferencias que tenía con la directiva del Arenas y fichó después en el año 1929 por el Athletic de Bilbao para jugar cedido en el Racing Club de Ferrol durante esa temporada por el servicio militar. En el equipo vasco se quedó once años, con la guerra mediante, en la que desertó de las filas republicanas para incorporarse al Frente Nacional en plena campaña del Norte por su ideología carlista. Formó parte de su potente delantera y con este club conquistó en cuatro ocasiones el torneo de Liga y en otras cuatro el de Copa. Además consiguió dos veces el trofeo Pichichi al marcar diecinueve goles en la temporada 1929-30 y doce en la 1931-32, siendo internacional en diecinueve ocasiones, cifra inmensa para la época, y único titular del año 1936 que repitió puesto en el primer partido de la postguerra. Pero en el año 1940 fichó por el Valencia y aquí ganó dos ligas y un Campeonato de Copa formando parte de la famosa “delantera eléctrica” junto con Epi, Amadeo, Mundo y Asensi y fue el jugador que marcó el gol número 500 del Valencia en Primera División. En aquellos tiempos se le denominó el “bala roja”, un extremo veloz e ingobernable que poseía un látigo en cada pierna y otros tantos recursos que le convertían en letal. No era alto pero derribarle era toda una proeza.
Por eso a los 31 años Colina fue a por él y, tras una dura negociación ya que el jugador se amparaba en sus negocios de ferretería para no irse de Bilbao, vino a Valencia listo para convertirse en el líder de la joven “delantera eléctrica”. Este era un Gorostiza menos veloz y espectacular pero una verdadera enciclopedia de fútbol que imponía un respeto supersticioso a los defensas y conservaba dos cañones de precisión pues sus derechazos hacían tanto daño como sus disparos con la zurda. Pero su personalidad bohemia y anárquica le fue llevando hacia el alcoholismo sin afectar demasiado en su juego. En varias ocasiones salió a jugar manifiestamente bebido hasta el punto en que en un Valencia – Sevilla la gente se burló de él coreándole su adicción por haber dado una patada al suelo en el lanzamiento de un penalti. Gorostiza, personaje genial, se resarció marcando los cuatro goles del 1 – 4 del resultado final. En el año 1946 fichó por el Baracaldo, y en el 1948 se marchó al Logroñés para alternar funciones de jugador y entrenador. Se retiró finalmente en el equipo asturiano del Juvencia de Trubia.
De su vida azarosa y complicada se dice que desaparecía en muchas ocasiones durante días para volver a aparecer minutos antes de cada encuentro con las botas bajo el brazo. Además ordenaba que mandaran facturas al club de compras de trajes que allí descontaban de su sueldo. En total jugó 257 partidos en Primera División en los que anotó 185 goles y recibió en el año 1951 un merecido homenaje en Bilbao. Cuando falleció a los 57 años de edad en el Sanatorio de Tuberculosis de Santa María se encontró una pitillera regalada por Luís Casanova con esta dedicatoria; "Al mejor extremo izquierdo del mundo de todos los tiempos”. Y es que lo emocionante de esta anécdota es que a pesar de las dificultades económicas que tuvo en el final de su vida, nunca se desprendió de ella. Mostramos la viñeta de un cómic , una fotografía en que aparece con otros jugadores del Valencia cuando ya tenía un aspecto deteriorado y un cartel de su participación el el film Campeones. Poco antes de fallecer apareció en el documental Juguetes Rotos en el que se narraba en olvido de las estrellas tras su éxito en los terrenos de juego...

Emotivo documental sobre Gorostiza.